¿Qué idea te viene a la cabeza cuando escuchas la palabra optimista? ¿Alguien que sonríe a pesar de las dificultades, que siempre lo ve todo de color de rosa? ¿Un ingenuo que no sabe nada de la vida?
Voy a intentar abordar este concepto en tres artículos, para que podamos ver la importancia de ser optimista, lo que significa y cómo podemos trabajar esta cualidad en nuestra vida.
Desde hace muchos años los psicólogos han estudiado estos dos tipos de personas, los optimistas y los pesimistas.
Según los psicólogos las características de las personas optimistas serían las siguientes:
- Cuando a una persona optimista le sucede algo malo tiende a pensar que es un contratiempo pasajero y que se debe a una única circunstancia.
- Creen que los problemas suceden por mala suerte, o simplemente porque de vez en cuando ocurren cosas malas. No se culpan.
- Cuando enfrentan un problema lo perciben como un reto e intentan resolverlo una y otra vez, cada vez con más energía.
Y, también según la Psicología, las personas pesimistas tendrían estas características:
- Piensan que las cosas desagradables que les suceden durarán para siempre.
- Creen que la mayor parte de cosas malas que les ocurren son por culpa suya e inevitables.
- Cuando están delante de una circunstancia adversa se rinden con facilidad.
¿Y qué consecuencias tiene pensar de una u otra forma?
Cientos de estudios demuestran que los pesimistas se rinden con más facilidad y en consecuencia les va peor en sus estudios y su trabajo que a los optimistas. En cuanto al deporte, los optimistas sobrepasan los promedios en las pruebas de aptitud.
Cuando los optimistas aspiran a ocupar un cargo tienen más posibilidades de triunfar que los pesimistas, tienen también mejor salud y un sistema inmunitario más fuerte, envejecen mejor y con menos achaques propios de la edad y, finalmente, viven más años que los pesimistas.
No siempre es fácil saber quién es pesimista, a veces viven en la sombra del pesimismo muchas personas que jamás hubieran pensado que lo son. Yo misma, antes de hacer el test que os voy a enlazar a continuación, pensaba que era una persona muy optimista.
Y es importante que sepamos que nuestra actitud puede afectar al control que tenemos sobre la vida, ya sea aumentándolo o reduciéndolo.
Por ejemplo, si pensamos que no podemos intervenir en el futuro de nuestros hijos podemos quedarnos paralizados a la hora de actuar. Y es así como cedemos el control a los amigos de nuestros niños, a sus maestros y a las circunstancias. Cuando sobreestimamos nuestra impotencia siempre habrá otras fuerzas que tomen el control y modelen el futuro, ya sea de nuestros hijos, de nuestras finanzas o de cualquier aspecto de la vida.
¿CÓMO SE MIDE EL OPTIMISMO? COMPRUEBA TU NIVEL DE OPTIMISMO CON UN SENCILLO TEST
Y no, no es un test que me haya inventado yo. Su creador fue Martin Seligman, creador de la Psicología Positiva y puedes encontrarlo online en la siguiente web de la Universidad de Pensylvania
https://www.authentichappiness.sas.upenn.edu/es
Es una web muy interesante, si te das de alta en ella puedes, de forma gratuita, acceder a un montón de información, videos, test y artículos sobre psicología positiva. Te la recomiendo encarecidamente. Y cuando realices el test sobre el optimismo quizás te sorprendas tanto como yo.
Para encontrar el test sobre el optimismo, has de ir a la pestaña “Cuestionarios” y el último de ellos es el que se denomina “Test de Optimismo”.
Tómate el tiempo que necesites para contestar el test, no hay preguntas correctas ni incorrectas. Te llevará unos quince minutos y es muy recomendable hacerlo antes de leer mi siguiente post. En todas las preguntas encontrarás dos opciones, escoge la que más se acerque a tu forma de ser, no a lo que otros esperen de ti, o lo que te gustaría ser.
Ahora guarda los resultados y en un próximo artículo analizaremos los tres tipos de errores que nos impiden ser optimistas.
